Se propuso llegar a la meta. Había dos caminos: uno con luz y otro oscuro.Escogió el primero. Según él, al ser mas claro aseguraba su victoria. No contaba que también habia que desviar varios obstáculos.
Otro le aconsejo que se fuera con él por el segundo camino para enfrentarse los dos a sus terribles trampas y así vencer más fácilmente los miedos.
Él se había negado y ahora se arrepentía.
Todo que veía fácil, se le fue haciendo mas y mas complicado al punto que las fuerzas le fallaron y se derrumbo. No quería seguir. Lo daba todo por perdido. Posiblemente su contrincante ya había subido a la cima y habría gritado a los cuatro vientos: ¡LO LOGRE!
Le animaron a que siguiera, que no se dejara vencer. Su propio contrincante le vio dolorido, le tendió la mano y ambos subieron a la cima. Abrieron la boca, inspiraron todo aire posible y entonces al unísono gritaron.
¡LO LOGRAMOS!
Si llegas a una etapa de frustración de no poder cumplir ese deseo que tantas ganas tenias de obtener. Haz una cosa: cuando uno cae al suelo, se levanta, se sacude y sigue hacia adelante. Hazlo. Utiliza esta frase. No te rindas. La palabra RENDIRSE no debe existir en tu diccionario. Si es necesario esfuérzate el doble. No puedes atrancarte con que: ese es que tuvo suerte y esta ahí. ¡NO! La suerte no existe, si tú no te lo propones.Tienes que seguir. Si vuelves a fracasar y esa meta la has dado por imposible puedes alardear que lo intentaste, que no te distes por vencido.
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